Las cerraduras inteligentes han demostrado ser dispositivos de seguridad fiables, fáciles de manejar, resistentes a muchos ataques delictivos, sin embargo, algunos cerrajeros profesionales se han dado a la tarea de explicar a sus clientes algunas desventajas, mejor dicho, algunos puntos débiles que deben ser considerados, antes de adquirir e instalar una de estas cerraduras.

Se vuelven obsoletas en poco tiempo

De acuerdo con cerrajeros en Barcelona, las cerraduras inteligentes son, sin lugar a dudas, una gran muestra del avance de la tecnología en el área de la seguridad, sin embargo, esta cualidad, más que ser vista como una ventaja, puede representar una desventaja para muchos usuarios.

La razón es muy sencilla, con el impresionante avance que ofrece la tecnología en la actualidad, significa que podrían dejar de ser 100% efectivas en un periodo de tiempo relativamente corto, en comparación con las cerraduras mecánicas, cuyo tiempo de vida útil está estimado en 12 o 15 años, de acuerdo con los cuidados que el propietario aplique a este dispositivo de seguridad.

Por supuesto, esto no significa que van a dejar de funcionar en una semana, pero su tiempo de vida útil es menor a una cerradura mecánica.

Requieren actualizaciones de manera regular

Como se mencionó anteriormente, a medida que este tipo de dispositivos son optimizados, no solo mejoran el diseño físico de la cerradura, también realizan ajustes del software, por lo que surgen las conocidas actualizaciones.

Si su dispositivo no recibe las actualizaciones de manera oportuna, dejará de cumplir algunas funciones o no van a proporcionar la protección requerida para ciertos incidentes, entonces, dejará de ser efectiva y eficiente.

Y si se trata de una cerradura de protocolo cerrado, significa que si la empresa que las fabrica llega a cerrar, eventualmente será imposible encontrar los repuestos necesarios, y su software no recibirá las actualizaciones que le permiten ser dispositivos competitivos en el mercado.

Algunos usuarios no son compatibles con la tecnología

Esto puede parecer una broma, pero es cierto, hay usuarios que no se sienten a gusto con la tecnología. Quizás consideren que avanza demasiado rápido, y cuando apenas están dominando algunas funciones, las actualizan y deben volver a comenzar.

Ni hablar si se trata de adultos mayores, quienes desconfían de utilizar mandos a distancia, o colocar la huella en el pequeño escáner de la cerradura, y prefieren utilizar su llave, una técnica tradicional, pero que siempre les ha parecido muy efectiva.

El precio

Este factor puede ser muy relevante para muchos usuarios, bien sea porque no cuentan con el presupuesto necesario para instalar este tipo de dispositivos, o consideran que es un gasto muy elevado, para un dispositivo que posiblemente en algunos años deberá ser reemplazado.

En cualquier caso, la realidad es que muchos usuarios optan por las cerraduras inteligentes, principalmente por el tema de la comodidad, no tener que tener más llaves al salir, y que se pueda manejar desde el móvil.

Pero, en cuanto al nivel de seguridad, la cerradura inteligente y la mecánica cumplen la misma función, con mucha eficiencia, mientras que los propietarios sigan las instrucciones y lleven a cabo el respectivo mantenimiento.